sábado, 16 de junio de 2012

CUANDO EL FOTOMONTAJE SE CONVIRTIÓ EN AGITACIÓN SOCIAL

 Tercera Información, 14/06/2012 


La Juan March de Palma de Mallorca acoge una exposición que investiga el origen del fotomontaje como propaganda político-social


La muestra “Fotomontaje de Entreguerras (1918-1939)”, hasta el 8 de septiembre en la Juan March de Palma de Mallorca, pretende ofrecer un panorama conciso y representativo del origen del procedimiento del fotomontaje como forma artística y de su desarrollo paralelo en diferentes ámbitos, de modo especial en Alemania y en la Unión Soviética en los años veinte, con una particular atención al periodo de eclosión de esta técnica y su práctica: l’entre–deux guerres.

Está compuesta casi en su totalidad por préstamos de la colección del estadounidense Merrill C. Berman, y cuenta con más de cien obras de temática diversa, de artistas y diseñadores de diez países. Incluye fotocollages y maquetas originales, así como ejemplares de carteles, postales, revistas y libros.

En manos de artistas como El Lissitzky (1890–1941), Aleksandr Rodchenko (1891–1956) o Gustavs Klucis (1895–1938), el fotomontaje se convirtió en la Rusia soviética en una poderosa herramienta política. La inmediatez significante de la imagen fotográfica fue muy utilizada en la creación de carteles para la propaganda del régimen soviético, los productos del país o los mitos de Lenin y Stalin. Mientras, artistas como los hermanos Sternberg combinaban con maestría el fotomontaje precisamente en el ámbito más específico del montaje de imágenes en movimiento —el cine—, junto a maestros como Eisenstein y Vertov.

Casi al mismo tiempo, en Alemania, artistas como Kurt Schwitters colocaban el fotocollage y el fotomontaje en el centro de su práctica artística, y otros como John Heartfield (1891–1968), Max Burchartz (1887–1961) lo incorporaban a su obra para criticar el régimen nacionalsocialista, en pleno ascenso en los años treinta. Otros, como los holandeses César Domela Niewenhuis (1900–1992), Paul Schuitema (1897–1973) o Piet Zwart (1885–1977), aprovecharon la extrema eficacia del fotomontaje para sus anuncios publicitarios de los productos más diversos y el diseño de publicaciones y revistas.

El extenso repertorio de carteles presentes en la exposición muestra el enorme poder que el fotomontaje ejerció en la política, la agitación social, la publicidad y el mercado, al mismo tiempo que hace visible su utilización por las vanguardias durante estas dos décadas. La exposición está acompañada por un catálogo ilustrado en dos ediciones, española e inglesa, que cuenta con un ensayo de Adrian Sudhalter, una cronología y una selección de textos y documentos históricos —algunos de ellos inéditos— de algunos de los artistas representados